¿Cuál es el PRECIO DEL DÓLAR HOY?
Sociedad

El último vuelo de ‘Témpano’, el valiente piloto FAP

Tragedia aérea. Restos del mayor FAP Ramiro Rondón Medina y del Mirage 2000-P fueron hallados en el volcán Picchu Picchu. Oficial fue ‘Ala de Oro’ y tenía 1.500 horas de vuelo.

Trágico. El mayor Ramiro Rondón ingresó a la Fuerza Aérea en el 2006 y egresó como piloto de caza. Sus amigos lo llamaban el Témpano. Foto: difusión
Trágico. El mayor Ramiro Rondón ingresó a la Fuerza Aérea en el 2006 y egresó como piloto de caza. Sus amigos lo llamaban el Témpano. Foto: difusión

Se terminó la ilusión. Miembros del equipo de Búsqueda y Rescate de la Fuerza Aérea del Perú encontraron ayer los restos del mayor FAP Ramiro Alfredo Rondón Medina, piloto del Mirage 2000-P que estaba desaparecido desde el jueves y que también fue hallado entre escombros, cerca del volcán Picchu Picchu, en Arequipa.

La FAP comunicó que el cuerpo del oficial así como la siniestrada aeronave militar fueron localizados en el lado oeste de la cumbre ubicada cerca al distrito de Chiguata, a unos 45 minutos de la plaza de armas de la Ciudad Blanca.

Murió un héroe de la patria. Un militar admirado por sus compañeros, piloto con experiencia, protagonista de memorables vuelos. Sus amigos lo llamaban el Témpano por la frialdad que mostraba cuando participaba en las misiones más riesgosas. Tenía acumuladas 1.500 horas de vuelo.

Sus compañeros de promoción no tienen dudas de que este valeroso oficial se habría inmolado llevando la aeronave hasta esa cumbre para evitar impactar en una zona urbana.

Rondón Medina realizaba un vuelo de entrenamiento a baja altura cuando perdió comunicación con la torre de control del Grupo Aéreo n° 4, a las 10.30 horas del jueves.

Experto aeroespacial

Apenas se activó el sistema de emergencia se iniciaron las labores de búsqueda por aire y tierra, pero luego de ocho horas, debido a las malas condiciones meteorológicas en la zona de operaciones, las patrullas de las Fuerzas Especiales y las tripulaciones de un helicóptero MI-17 y un avión C-26B suspendieron la búsqueda.

Ayer, desde las 6.00 de la mañana, retomaron los trabajos con la esperanza de encontrarlo con vida, pero finalmente sus restos fueron hallados entre los escombros del caza.

Ramiro Rondón nació en Jesús María el 26 de mayo de 1988. Ingresó a la Fuerza Aérea en marzo del 2006 y egresó con la especialidad de piloto de caza.

Durante su formación participó en cursos de capacitación en el Perú y el extranjero, como Canadá, Colombia y Francia, fortaleciendo sus capacidades en programas de respuesta táctica, de vuelo, en administración aeroespacial, entre otros.

Designado ‘Ala de Oro’

Por su esfuerzo intelectual y sus habilidades, el mayor Rondón obtuvo la condecoración ‘Ala de Oro’, al graduarse en el primer lugar del curso de vuelos de su promoción.

El oficial desempeñó distintos cargos, como jefe del Departamento de Operaciones y Entrenamiento, comandante de Escuadrón de Mantenimiento Aéreo EMA n° 406; jefe del Departamento Táctico del Escuadrón Aéreo n° 412; jefe del Departamento de Instrucción del Escuadrón Aéreo n° 512, entre otros.

En junio del año pasado viajó a Francia con otros dos oficiales y participó en la 54º Edición del Salón Internacional de la Aeronáutica y el Espacio que se realizó en el recinto ferial de Le Bourget, ubicado en las afueras de la ciudad de París.

JIA investiga las causas del accidente

Pero ¿qué pasó con el Mirage 2000-P? El coronel Manfred Rondón, director de información e intereses aeroespaciales del Perú, dijo que el mantenimiento de estas naves es periódico y continuo, y será la Junta de Investigación de Accidentes (JIA) la que determine las posibles causas del siniestro.

Dijo que no hubo pérdida de comunicación con la torre de control. También señaló que las condiciones meteorológicas eran favorables, pero con cambios constantes. Recordó que estos aviones tienen un sistema de eyección.

Periodista profesional, egresado de la Escuela de Periodismo Jaime Bausate y Meza. Me gusta explicar, enseñar, compartir. A lo largo de mi carrera he cubierto casos resonantes que nos ha tenido más horas en la computadora que lo habitual, siempre aferrado a un estilo, que combina datos, análisis, entrevistas, crónicas.